Diferencia entre revisiones de «Extraterrestres»

Última revisión de 13:02 8 ago 2023

Aunque la palabra "extraterrestre" se refiere a todo aquello que un tiene origen origen externo a la Tierra, en el contexto de la ciencia ficción se entiende por extraterrestres a los seres y civilizaciones provenientes de otros planetas.

La posible existencia de vida extraterrestre es uno de los campos de investigación más estimulantes de la ciencia. De hecho, ya desde las misiones Viking la búsqueda de indicios de vida en Marte es una de las prioridades de cualquier misión.

La ciencia ficción ha enfrentado el tema desde perspectivas muy diferentes. Por una parte, la Space Opera, entendida como la forma más lúdica del género, los ha tratado como seres exóticos, a menudo hostiles, destinados a apoyar el argumento y crear una ambientación acorde con el escenario; por otra, la ciencia ficción prospectiva ha tratado las consecuencias de un posible Contacto en la sociedad humana o ha especulado acerca de otras formas de sociedad o civilización.

El mismo aspecto de los extraterrestres varía en función del subgénero. Salvo en la ciencia ficción dura, casi todos los extraterrestres que aparecen en las obras de ciencia ficción son formas de vida más o menos complejas, en casi todos los casos inteligentes y civilizadas y a menudo superiores a los humanos, generalmente con biologías y aspectos muy diferentes, aunque es posible que sean similares o, incluso, idénticos al ser humano.

Vida extraterrestre y el problema del origen de la vida:

No obstante, conviene no olvidar que la posible existencia de vida extraterrestre no implica que esta vida sea inteligente ni, que siendo inteligente, haya logrado desarrollar una civilización capaz de interaccionar con la nuestra, conceptos con los que trabaja la ecuación de Drake.

La posibilidad de encontrar vida en otros cuerpos exteriores a la Tierra se asumió casi como una evidencia, una inevitabilidad en los primeros estadios de la ciencia (o de la protociencia). Por ejemplo, el mismo Robert Hooke, al tomar conciencia de las posibilidades del microscopio y del telescopio, le parecía muy probable que se llegaran a desarrollar dispositivos que permitieran descubrir criaturas vivas en la Luna y en otros planetas.

En el siglo XX, a la luz de la mayor comprensión que se ha adquirido sobre el tema de biología y el origen de la vida, los científicos son generalmente más escépticos en cuanto a la posibilidad de encontrar vida en el sistema solar. Los experimentos de Miller y Urey en 1953 parecían sugerir que, dadas unas condiciones iniciales (fundamentalmente, algunos compuestos orgánicos sencillos, agua y energía) sería posible el surgimiento de la vida de manera espontánea.

Actualmente, los científicos expertos en exobiología se encuentran muy interesados en el estudio de cuerpos del sistema solar como Encélado o Titán, por cumplir el requisito inicial de poseer agua en estado líquido. En sí mismos, estos cuerpos son experimentos sobre abiogénesis. De encontrarse evidencias de vida en ellos, el estudio de la misma permitiría avanzar enormemente en este campo y quizás determinar con mayor precisión el factor de vida de la mencionada ecuación de Drake.

Una aproximación racional a la posibilidad de civilizaciones extraterrestres:

La ecuación de Frank Drake

Artículo principal: Ecuación de Drake

La ecuación de Drake intenta calcular el posible número de civilizaciones tecnológicas en nuestra galaxia partiendo de la tasa media de formación de estrellas de tipo parecido al Sol (R), se aplican coeficientes que van reduciendo progresivamente la probabilidad según los siguientes parámetros de cálculo.

Según Carl Sagan, un optimista del contacto entre especies, existen millones de especies inteligentes tecnológicamente avanzadas en nuestra galaxia (si bien más adelante revisó sus cálculos dando un resultado de 10).

Isaac Asimov, mucho más comedido, suponía el valor de N en 530.000 el número de civilizaciones extraterrestres existentes.

La paradoja de Fermi

Artículo principal: Paradoja de Fermi

Con los cálculos anteriores en la mano, la paradoja de Fermi viene a preguntarse cómo es posible que con tal superpoblación en la galaxia todavía no hayamos contactado con ninguna de estas civilizaciones.

Se han propuesto muchas explicaciones para esta paradoja que, muy probablemente, no sea más que el resultado de enfrentar señales de potencia, extensión y duración de escala humana a distancias y tiempos de escala astronómica.

Extraterrestres en la ciencia ficción:

Los extraterrestres aparecen tanto en las más triviales obras de Space Opera (p.e. La guerra de las galaxias) como en obras mucho más serias y maduras (p.e. Solaris) en las que se especula acerca de las implicaciones de un posible contacto.

La evolución del concepto

La visión que se tenía de la vida inteligente extraterrestre ha ido evolucionando con el paso del tiempo a medida que se adquirían y popularizaban nuevos conocimientos sobre las posibilidades reales de lo que los escritores imaginaban.

Fue casi inevitable que los primeros extraterrestres imaginados fueran hombres en la Luna. Tras deshechar nuestro satélite como sostenedor de vida, la siguiente opción lógica fue la de Marte. De hecho, el planeta rojo ha sido protagonista de muchas sagas de ciencia ficción, a veces como simple marco exótico para una Space Opera y otras veces tratado con mayor seriedad.

La fiebre marciana (y eventualmente también la venusiana) duró toda casi toda la edad de oro, pero finalmente los autores de estos relatos fantásticos tuvieron que admitir que Marte también era un improbable escenario para la vida, al menos en la actualidad, ya que muchos han seguido elucubrando acerca de viejas civilizaciones extintas.

Pero dejando aparte el origen de estas especies, un asunto que también ha cautivado la imaginación es la forma que podrían adoptar nuestros vecinos en el universo. Una vez más, al principio se impuso la forma antropomoide, se podría decir que creamos a los extraterrestres a nuestra semejanza, dando lugar a relatos que extrapolaban los problemas entre las naciones de la Tierra a las posibles naciones del espacio: guerras, malentendidos culturales, racismo, xenofobia... así como economía, comercio y política basados en motivaciones muy humanas.

Un segundo frente se abrió rápidamente cuando comenzó a imaginarse que eran los extraterrestres quienes venían a la Tierra, básicamente a invadirnos y exterminarnos. Este versión, que se alimentaba del terror a lo desconocido, presentaba a alienígenas extremadamente deshumanizados en lo físico, pero no muy diferentes de una nación agresora en su enfoque comportamental. De hecho, la primera versión cinematográfica de La guerra de los mundos (1953) es una manera encubierta de teatralizar una invasión comunista.

Durante la nueva ola, la regeneración de los temas típicos de la ciencia ficción y su mayor tendencia a la profundización psicológica llevó, finalmente, a imaginar extraterrestres diferentes a los seres humanos ya no sólo en el físico, sino también cultural, piscológica y filosóficamente. La diversidad se disparó al empezar a considerarse posibles vidas inteligentes asexuadas, ameboides, carentes de cuerpo físico, mentes colmena y otra multitud de sugerencias que abordan el problema fundamental de la comunicación y la empatía entre especies que tienen tanto que ver con nosotros como una planta con un ratón.

Animales en la ciencia ficción:

Artículo principal: Bestiario de ciencia ficción

Aunque el género se ha interesado principalmente por las razas inteligentes (bien por las posibilidades dramáticas de un enfrentamiento militar, bien por las implicaciones filosóficas de un posible contacto), existen numerosos ejemplos de animales extraterrestres (entendidos como seres dotados de movimiento y cierta capacidad de reacción al entorno, pero no de inteligencia o consciencia).

La space Opera recurría a menudo a ellos para ambientar las historias, como puede ser el ejemplo de los animales empleados de montura en El Imperio contraataca (1980) o los múltiples "bichos" que revolotean en la saga de Star Wars. Sin embargo, en ocasiones, estos animales se vuelven parte fundamental de la historia (cuando no el eje principal de la misma), como podrían ser los gusanos de arena de Arrakis en la saga de Dune o Alien, la criatura que da título a la película de Ridley Scott.

Otras razas:

Artículo principal: Civilizaciones extraterrestres

Pero, sin duda, y tal y como se ha dicho, los ejemplos más importantes de extraterrestres en la ciencia ficción son aquellos en los que dichos seres están dotados de inteligencia y civilización (en ocasiones en niveles superiores a la humana).

A continuación se listan los ejemplos más significativos:

En la literatura

Evolución cronológica del tipo de extraterrestres reflejados en la obra escrita.

• La guerra de los mundos (1898): marcianos de extraña morfología atacan la Tierra
• Crónicas marcianas (1946): metafóricos marcianos casi idénticos a los terrestres son molestados, invadidos y exterminados
• El día de los trífidos (1951): ¿esporas espaciales o un experimento fallido? Plantas inteligentes invaden la Tierra
• El centinela (1953): una civilización misteriosa que nos vigila
• Estrella doble (1956): marcianos, los primeros contactos diplomáticos
• Brigadas del espacio (1959): las chinches, una especie de insectos belicosos, tan diferentes a nosotros que la comprensión o el diálogo son casi imposibles
• Forastero en tierra extraña (1961): marcianos, una civilización profundamente diferente a la nuestra más allá del simple aspecto físico
• Solaris (1961): un planeta vivo. Imposible empatizar con sus motivaciones ni establecer ningún baremos que lo pueda comparar a la inteligencia y el sentir humanos
• Tiempo de Marte (1964): una civilización marciana que agoniza
• Estación de tránsito (1964): multitud de civilizaciones que pueblan la galaxia
• Mundo Anillo (1970): diversas civilizaciones que compiten por el control de la galaxia
• Cita con Rama (1973): sin identificar, sólamente reconocibles por sus obras
• Pórtico (1977): sin identificar, sólamente reconocibles por sus obras
• Contra el infinito (1983): Aleph, una misteriosa nave que aparece y desaparece a su antojo mientras los humanos intentan terraformar un satélite
• Contact (1985): sin identificar, una civilización superior que ha dejado un mensaje para que lo descifremos cuando nuestro nivel de desarrollo refleja a un digno interlocutor
• El juego de Ender (1985): insectores, una especie de insectos, con su poquito de diferencia que provoca un malentenido cultural que desemboca en una guerra genocida

En el cine

En cine no se puede hablar propiamente de una evolución de conceptos, sino de una predominancia de géneros. Según el interés del productor, los extraterrestres han sido amigables y esperanzadores o amenazas sanguinarias que retan al espíritu de superación del protagonista o de toda la raza humana.

Con muy pocas excepciones, como Solaris (1972), el interés por la exploración del contacto ha sido nulo, la profundidad de los temas casi irrelevante.

• Ultimatum a la Tierra (1951): una confederación de civilizaciones extraterrestrs nos advierte de los peligros de la guerra nuclear
• La guerra de los mundos (1953): una malévola raza que sin previo aviso pretende invadirnos y exterminarnos
• La invasión de los ladrones de cuerpos (1956): una espora espacial llega a la Tierra y va sustituyendo los cuerpos de las personas por sus dobles carentes de emociones
• Encuentros en la tercera fase (1977): una civilización superior que pretende estrablecer un amigable primer contacto
• La guerra de las galaxias (1977): multitud de civilizaciones que pueblan la galaxia
• Star Trek (películas) (1979) (2002): multitud de civilizaciones que pueblan la galaxia
• E.T., el extraterrestre (1982): una civilización superior que establece un amigable primer contacto
• Predator (1987): un monstruo espacial de instintos homicidas
• Abyss (1989): una civilización superior que establece un amigable primer contacto
• Independence Day (1996): una malévola raza que sin previo aviso pretende invadirnos y exterminarnos
• Mars Attacks (1996): una cómica pero malévola raza que sin previo aviso pretende invadirnos y exterminarnos
• Contact (1997): una civilización superior que establece un amigable primer contacto
• El quinto elemento (1997): multitud de civilizaciones que pueblan la galaxia
• La guerra de los mundos (2005): una malévola raza que sin previo aviso pretende invadirnos y exterminarnos