Diferencia entre revisiones de «Guerra apocalíptica»

Revisión de 18:26 4 may 2012

‌‌‌Una guerra apocalíptica es un escenario apocalíptico en el cual perdura un conflicto bélico global que ya ha devastado el planeta.

Las características de este escenario son que los signos externos de civilización (ciudades e infraestructuras como autopistas, ferrocarriles o puertos) han sido mayoritariamente destruidos y la guerra perdura con la presencia de bandos enemigos organizados que pelean entre las ruinas.

Los contendientes pueden ser humanos, máquinas inteligentes o incluso extraterrestres, pero estas distintas naturalezas no alteran la correspondencia a un único escenario prototípico. ‌‌‌‌‌‌

Distinciones según los contendientes:

De manera general se admite que al menos uno de los bandos en conflicto está formado por humanos y, aunque el segundo bando, típicamente de "enemigos" puede estar formado por otros humanos, por invasores extraterrestres o por máquinas inteligentes que se han rebelado contra sus creadores humanos, se puede comprobar que las diferencias entre los diversos supuestos son mínimas.

Humanos vs. Humanos:

Artículo relacionado: Tercera guerra mundial

En este escenario se mantiene activo un conflicto armado de gran intensidad, una Guerra Mundial prolongada hasta la destrucción de las ciudades entre cuyas ruinas se sigue luchando con ejércitos bien dirigidos y organizados.

Frecuente durante la Guerra Fría, se mezclaba un escenarios de apocalipsis nuclear, que denunciaba los peligros del armamento nuclear, con uno en el que se denunciaba el absurdo mismo de la guerra: humanos luchando cuando aquello mismo por lo que luchan ha quedado ya destruido.

Prescindiendo del método de destrucción escogido (nuclear, biológico, convencional o una combinación de todos) el resultado es la escisión de la sociedad entre supervivientes civiles y soldados.

Si los personajes principales son soldados, la acción se centrará en la estrategia de la batalla y el motor suele ser la esperanza de victoria y liberación del invasor.

Si los protagonistas son civiles, el escenario puede ser aprovechado para hacer una denuncia contra la guerra en general, al narrar el conflicto desde el punto de vista de quienes sufren las consecuencias, atrapados en un campo de batalla omnipresente. En otros casos, la opción es una historia individual de supervivencia, normalmente repleta de acción y aventura.

Humanos vs. Aliens:

Artículo relacionado: Invasión extraterrestre

En este escenario, la civilización es arrasada por un ataque extraterrestre, y la invasión se encuentra en sus inicios o bien ya ha tenido éxito.

No se trata, por tanto, del típico escenario de batallas espaciales libradas a miles de años luz a bordo de poderosas naves espaciales, sino de combates cuerpo a cuerpo en la superficie del planeta.

Es conocido popularmente la característica del pulp estadounidense según la cual la lucha contra extraterrestres, inhumanos por definición, pretendía ser una metáfora de la amenaza comunista. En este sentido, aquellas obras que representan a los humanos en valerosa lucha contra alienígenas caracterizados por una despiadada personalidad colectiva, no presentan innovación alguna respecto al escenario anterior.

En definitiva, la civilización ha sucumbido al primer empuje de la invasión, pero el ejército y los supervivientes se organizan en una resistencia que prolonga la batalla. El motor de la acción, nuevamente, es la esperanza de liberación y las dolorosas pérdidas civiles.

Humanos vs. Máquinas:

Artículo relacionado: Rebelión de las máquinas

En este escenario, la civilización humana ha sucumbido debido a una guerra contra las máquinas, que se han rebelado y enfrentado a sus creadores humanos.

Fundamentalmente, este escenario no difiere en nada de los anteriores, al presentar a un típico enemigo inhumano que suele carecer de individualidad y que ataca con eficiente ausencia de piedad. En realidad, tanto da que las máquinas sean un producto de la inteligencia humana o provengan del espacio exterior.

Como únicas características propias, no siempre explotadas correctamente en las obras que utilizan este tema, podemos encontrar la admonición implícita que nos advierte sobre los peligros de jugar a ser dioses y la exploración filosófica sobre la independencia del creado respecto al creador.