32 de diciembre
| 32 de diciembre | |
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| Datos de publicación: | |
| Título original: | 32 Décembre |
| Fecha de publicación: | 2003 |
| Guión: | Enki Bilal |
| Dibujo/Tinta: | Enki Bilal |
| Color: | Enki Bilal |
| Editorial: | ' |
| Otros datos: | |
| Premios obtenidos: | |
| Otros datos: | No hay otros datos |
Enki Bilal (2003)
32 de diciembre es el segundo álbum que compone la tetralogía del monstruo, una obra distópica, futurista, que arremete contra el integrismo racial y religioso.
Argumento:
Al final de El sueño del monstruo (1998), Nike Hatzfield había encontrado a Leyla, su "hermana" de orfandad, mientras que su otro "hermano" Amir, quedaba en medio de Siberia siendo apuntado con una arma por su amada, Sacha, a quien la Obscurantis Order había lavado el cerebro.
Ahora descubrimos que Amir y Sacha han sido rescatados de la congelación y que Sacha está siendo tratada para librarse de la influencia de la mosca, Nike ha vuelto a Nueva York con Pamela y Leyla sigue trabajando en el desierto de Nefound, en el misterioso Paraje del Águila.
De nuevo aparecerá el ubicuo doctor Warhole y sus malévolos planes terroristas, entrometiéndose en la vida de los tres para tratar de descubrir qué esconde el Paraje del Águila y sembrar un artístico terror por el camino.
El estilo:
En relación al tomo anterior, la carga crítica ha disminuido al desaparecer la Obscurantis Order para ser sustituida por el malvado Warhole, un villano a la James Bond que personifica el mal en si mismo. En lo narrativo, el punto más interesante lo aporta el propio Nike Hatzfield, escindido en él mismo y dos de sus copias, cada una al encuentro de uno de sus hermanos. La progresiva degradación de la salud mental de Nike nos recuerda sin poderlo evitar al protagonista de la otra trilogía fundamental de Bilal, Nikopol.
Artísticamente, los dibujos son extraordinarios y los recursos de color realmente imaginativos, con imágenes casi oníricas, muy simbólicas. También se recrudece la violencia y en ocasiones el blanco y el rojo adquieren un protagonismo de contraste casi zen.
De nuevo, una obra muy recomendable para ser releída y saboreada.
