Efecto prospectivo
- Artículo principal: Ciencia ficción prospectiva
Se denomina efecto prospectivo o especulativo al desasosiego creado en el receptor producido por la disonancia entre la realidad exterior a la obra y el mundo posible de la obra, que le obliga a replantearse las convenciones sobre las cuales desea especular el autor.
Suele convenirse que esta especulación se centra en cuestiones sociales, psicológicas o éticas, y no meramente en simples cuestiones técnicas o científicas (más propias de la ficción científica o de la ciencia ficción dura).
El mecanismo para lograr este efecto prospectivo es la propuesta de un nóvum, una alteración de la realidad tal y como la conocemos en base a una propuesta posible, cuyo desarrollo coherente produce una realidad diferente (el mundo imaginado). El receptor de la obra, por lo tanto, mantiene simultáneamente la posibilidad del mundo imaginado y la realidad de la que parte, por lo que establece automáticamente paralelismos y comparaciones.
Por ejemplo, la novela distópica 1984, de George Orwell, especula sobre la sociedad resultante (mundo imaginado) de permitir a los gobiernos hacerse con el poder de controlar la información (este es el nóvum). Pero Orwell no alertaba meramente acerca de este futuro hipotético, sino que extrapolaba tendencias reales para advertir sobre un peligro inminente, no futuro. Lejos del mero entretenimiento, el receptor de la obra contempla el mundo de la novela y lo compara con su propia realidad. Y fruto de esta comparación, siente un desasosiego que le incita a observar con más cuidado la propia realidad, replanteándose la trascendencia de aspectos que creía irrelevantes o incluso naturales.