La Luna es una cruel amante
Robert A. Heinlein (1966)
Una vez más, un claro ejemplo de la literatura de Heinlein: personajes fuertes, individualistas, mujeres hermosas y prácticas y, ante todo, una fuerte carga ideológica.
Del mismo modo que hizo con Brigadas del espacio, este libro sirve de escaparate a Heinlein para exponer sus ideas liberales: en un mundo sin leyes y con libre mercado, los ciudadanos se agrupan y comercian de forma libre, generando riqueza y compartiéndola de forma interesada y natural.
La historia (la lucha de los habitantes de la Luna por su independencia) no es más que una excusa. De lo único que trata este libro es de exponer las ventajas del libre mercado. Según Heinlein, sin leyes ni Estado los crímenes se reducen, la riqueza aumenta y los hombres son más libres y felices.
La ideología es discutible, la fuerza de la narración de Heinlein no.
Premios:
Es una de las novelas más reconocidas de Heinlein y cuyo aprecio por parte de los lectores ha ido incluso en aumento a lo largo del tiempo, llegando a ser considerada la segunda mejor novela de todos los tiempos, sólo por detrás de la indiscutida Dune, de Frank Herbert.
Obtenidos:
- 1967: Premio Hugo de novela (el año anterior lo había perdido ante Dune)
- 1975: Encuesta Locus: Mejor novela de todos los tiempos - Puesto 8º
- 1983: Prometheus Hall of Fame
- 1987: Encuesta Locus: Mejor novela de todos los tiempos - Puesto 4º
- 1998: Encuesta Locus: Mejor novela anterior a 1990 - Puesto 2º
Finalista:
- 1966: premio Nebula de novela
- 1966: premio Hugo de novela