Mercado cautivo
¡Atención, spoilers! Aquí se desvelan detalles de la trama y el argumento |
Mercado cautivo | |
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Autor: | Philip K. Dick |
Otros títulos: | El cliente perfecto |
Datos de primera publicación(1): | |
Título original: | Captive Market |
Revista o libro: | If |
Editorial: | Quinn Publishing Company, Inc. |
Fecha | Abril de 1955 |
Publicación en español: | |
Publicaciones(2): | Philip K. Dick. Cuentos completos IV (1987) |
Otros datos: | |
Saga: | No pertenece a ninguna saga |
Premios obtenidos: | No se le conocen |
Otros datos: | No hay otros datos |
Fuentes externas: | |
Tercera Fundación | [{{{URL-3F}}} Ficha] |
ISFDB | [{{{URL-ISFDB}}} Ficha] |
Otras fuentes | {{{URL-OtrasFuentes}}} |
Notas: | |
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Philip K. Dick (1955)
El relato discurre en dos puntos diferentes de la línea temporal. En uno tenemos a una anciana miserable sin más ambición que el lucro propio. Regenta una tienda y cree haber encontrado un filón que la hará rica.
Este filón está situado muchos años en el futuro. En este segundo escenario la Tierra ha sido arrasada por un holocausto nuclear. En medio de la desolación, un grupo de supervivientes trata de poner en marcha un cohete para huir a Venus, donde confían poder empezar una nueva civilización.
Pero para ello necesitan materiales y, antes incluso, alimentos, pues la Tierra es estéril. Es en este punto en el que interviene la anciana. Ésta tiene el don de moverse en el tiempo. Ha logrado llegar hasta ellos y les proporciona alimentos y materiales... a cambio de enormes sumas de dinero que, sin embargo, no vale nada en el mundo futuro. Los supervivientes pueden recoger cuantos billetes deseen para entregárselos a la anciana a cambio de alimentos y materiales.
Puede parecer una situación de mutuo beneficio, pero no es así; es la anciana quien tiene el control de la situación. Y es que ella puede moverse al futuro, y cuando lo hace, debe elegir la línea temporal a la que desea viajar. En el relato, a partir de un acontecimiento, el futuro se desdobla en función de las consecuencias que tenga uno u otro resultado. Por eso, cuando los supervivientes logran poner en marcha el cohete, ella viaja a un futuro en el que el cohete ha caído y ha quedado inútil, pero en el que los tripulantes han sobrevivido.
Y es que el personaje de la anciana es el de una persona mezquina, ruin y miserable a la que nada importa el futuro de la humanidad, sino tan sólo el poder ganar un dinero que acumula de forma avarienta en una caja de cartón de su trastero.