Percepción extrasensorial

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La percepción extrasensorial es un conjunto de poderes psíquicos que permiten percibir sucesos o fenómenos mediante canales diferentes de los sentidos físicos.

Suelen ser poderes relacionados con la percepción, es decir, con el hecho de recibir información, más que con la capacidad de actuar sobre el entorno, por lo que no incluiría poderes como la telekinesis o la manipulación mental.

Dado que uno de los pilares de la ciencia ficción es la plausibilidad, los poderes psíquicos en general no deberían tener cabida dentro del género. Sin embargo, con la publicación de la obra de Charles Hoy Fort y tras los discutibles experimentos de J.B. Rhine en la Universidad de Duke en la primera mitad del siglo XX, que parecieron dar a entender que estos fenómenos eran posibles, es frecuente en la ciencia ficción la aparición de poderes psíquicos.

Los principales poderes relacionados con la percepción son la telepatía y la precognición. La primera sería la capacidad de leer el pensamiento de otras personas (aunque en algunas obras se emplee para "hablar" a la mente de otras personas, lo que ya no sería tanto percepción extrasensorial como manipulación mental). La segunda sería la capacidad de predecir el futuro.

Se pueden ver ejemplos en obras como Muero por dentro (1972), El hombre demolido (1952) o Desafío total (1990) en el caso de la telepatía, o Minority Report (1956), El hombre dorado (1954) o Dune (1965) en el de la precognosciencia.

Existen otros poderes menos frecuentes, como el viaje en sueños, que aparece en los primeros relatos de Crónicas marcianas (1950), cuando los marcianos perciben en sueños la llegada de los exploradores terrestres, o la xenoglosia (hablar lenguas desconocidas) que podemos ver en Doctor Who (2005) o Farscape (1999).

No obstante, existe un enorme abanico de percepciones extrañas introducidas en relatos de ciencia ficción: pantomnesia, rabdomancia o postcognosciencia; no obstante, muchas veces estas facultades extraordinarias son proporcionadas por la tecnología, algo nada descabellado en muchos casos.