Diferencia entre revisiones de «Ladrones de cuerpos»

Revisión de 11:02 28 mar 2008

Jack Finney ({{{Año}}})

Jack Finney (1955)

La historia:

El libro describe la historia del doctor Miles Bennel y su enfrentamiento a una peligrosa invasión extraterrestre.

Esta invasión no es un sincero ataque mediante armamento superior al que la humanidad pueda enfrentarse con valentía y arrojo, sino una sutil sustitución de hombres y mujeres por seres idénticos en forma que conservan sus mismos recuerdos, pero que carecen de sentimientos.

De esta forma, las primeras evidencias del ataque toman la forma de una extraña epidemia prersonas que aseguran su marido no es su marido, o que su padre no es su padre.

Asombrado por esta curiosa epidemia, poco a poco Miles va hilando las pistas hasta descubrir que, en su pequeño pueblo de Santa Mira pocos son ya quien parecen ser.

La idea original:

Muchos han visto en esta novela de Finney una reinterpretación de un relato publicado el año anterior por Philip K. Dick, El padre-cosa en el cual un chico de diez años descubre que su padre ha sido suplantado por una especie de larva que crece en el jardín. Aunque la similitud en el concepto es evidente; hay que admitir que el tratamiento de ambas historias es muy diferente.

¿Crítica anticomunista o antimacartista?:

A menudo esta obra ha sido interpretada de diferentes maneras. Algunos aseguran que esos insidiosos enemigos ocultos y sin sentimientos son, en realidad comunistas (recordemos que la obra está escrita en plena guerra fría); para otros son espías del macartismo (recordemos también que la primera mitad de los años '50 es la de la caza de brujas del senador McCarthy).

Ambas interpretaciones parecen tener sus razones, pero tal vez convenga recordar que en 1979 Stephen King, con motivo de la segunda adaptación cinematográfica dirigida por Philip Kaufman, se dirigió a Finney, y recibió la siguiente respuesta:

"... He leído algunas explicaciones acerca del 'significado' de esta historia que no pueden sino divertirme, porque no existe en ella 'significado' alguno; escribí la historia con ánimo de divertir, y ese es el único sentido que tiene."