Profesor chiflado
El profesor chiflado es un personaje estereotipado que aparece a menudo en las obras de ciencia ficción. Como todo estereotipo, ayuda al lector o espectador a identificar cláramente al personaje, sin necesidad de perder el tiempo en descripciones. Por otra parte, el estereotipo resta profundidad al personaje, por lo que su uso es más frecuente en obras breves y de argumentos sencillos.
El profesor chiflado suele ser un erudito ligado al mundo académico y universitario, con una gran capacidad intelectual y conocimientos enciclopédicos en todo aquello relacionado con su campo de estudio o trabajo. Frecuentemente se le ve enemistado con otros académicos igualmente inteligentes y capacitados, pero con puntos de vista radicalmente diferentes, con los cuales puede discutir durante horas acerca de las causas o implicaciones de hechos intrascendentes más allá del mundo académico.
A diferencia del científico loco, cuyas investigaciones pueden tener un fin malvado o consecuencias peligrosas, el profesor chiflado es un individuo excéntrico que aporta un toque humorístico al argumento.
Aunque generalmente se trata de un individuo torpe y despistado que se siente desorientado fuera de su laboratorio o biblioteca, existe también el estereotipo del arqueólogo o antropólogo que se siente a sus anchas en la selva. En este último caso su torpeza puede evidenciarse cuando, al regresar a la civilización para comunicar sus conocimientos, es incapaz de acostumbrarse a las costumbres y protocolos de la vida social.
Ejemplo de profesores chiflados podemos encontrarlos en el profesor Challenger de El mundo perdido o en el profesor Tornasol de Tintín.