Aliens: El regreso

Aliens: El regreso
Ficha técnica
Título original:	Aliens
Nacionalidad:	Reino Unido / EE.UU.
Estreno 1:	14 de julio de 1986
Duración:	137 min. 154 min. (ed. expecial)
Ficha artística
Dirección:	James Cameron
Guión:	James Cameron, David Giler y Walter Hill basados en los personajes de Dan O'Bannon y Ronald Shusett
Producción:	Twentieth Century Fox
Fotografía:	Adrian Biddle
Música:	James Horner
Reparto:	Sigourney Weaver, Carrie Henn, Michael Biehn, Paul Reiser, Lance Henriksen, Bill Paxton, Jenette Goldstein, William Hope, Carl Toop...
Información suplementaria
Otros datos:	dirección artística y decorados: Peter Lamont y Crispian Sallis
Imdb:	Ficha en Imdb
Notas:
Fecha de primer estreno. No tiene por qué coincidir con el estreno en salas comerciales o emisión en abierto; puede ser en premieres, festivales u otras formas de distribución reducida o exclusiva.

James Cameron (1986)

Sinopsis:

Tras 57 años en hibernación, Ripley es finalmente rescatada. En cuanto se recupera, la Compañía abre una comisión para investigar los acontecimientos que llevaron a la destrucción de la Nostromo así como de su remolque con 20 millones de toneladas de mineral. Los ejecutivos de la Compañía dan poco crédito a la historia de Ripley y ésta es despedida y anulada su licencia de navegante.

Sin embargo, durante los 57 años que han pasado, la luna LV-426 en la que la tripulación de la Nostromo encontró los restos de la nave alienígena ha sido colonizada por una avanzadilla de ingenieros y sus familias. Su objetivo es terraformar la luna, pero sus exploradores no tardan en encontrar la nave estrellada y al poco tiempo se pierde contacto con la colonia.

Todo parece sugerir que la historia de Ripley tiene cierta base, y la compañía la presiona para que se una a una expedición militar destinada, en teoría, a rescatar a los colonos supervivientes y erradicar la infestación de xenomorfos.

La película:

Esta secuela a Alien, el octavo pasajero (Ridley Scott, 1979) fue un rotundo éxito y terminó de asentar a James Cameron, tras Terminator (1984), como un director espectacular y con gran olfato para la taquilla.

Cameron era admirador de la película original y la idea de hacer una secuela partió de su propia iniciativa. Como resultado, su propuesta resulta respetuosa con la idea de Scott, pero no se limita a reproducir el esquema de película de terror centrada en un monstruo acechante. En lugar de ello, Cameron expandió el concepto inicial de Scott, creando el estándar del mundo en el que se desarrollarían posteriores trabajos, y trasladó el marco de referencia de su obra a una mezcla entre cine bélico y de terror que enlazaba con la tradición de los marines espaciales de la ciencia ficción.

El concepto que vertebra la obra es el enfrentamiento de marines coloniales, altamente entrenados y bien pertrechados, y un nido de xenomorfos, a priori, una situación de control de alimañas que no debería representar dificultades. Sin embargo, el desarrollo de la misión no se ajusta a esta previsión y asistimos durante gran parte del metraje de la película al repliegue controlado de los marines, superados por la situación.

Cameron abiertamente admitió haberse inspirado en la guerra de Vietnam al presentar una situación en la que la superioridad tecnológica, en un entorno hostil y desconocido, puede no ser suficiente. Una segunda fuente de inspiración pudo ser Tropas del espacio (Robert A. Heinlein, 1959), novela que al parecer Cameron instó a leer a los actores que encarnarían a los marines coloniales y que, en cierta manera, sienta el canon.

Sin embargo, una película enteramente bélica desaprovecharía en gran medida el potencial intimidante de la criatura creada por H.R. Giger, al tiempo que debilitaría la conexión del público con un protagonista individual. En este punto se advierte la gran pericia de Cameron también como guionista, al conseguir reducir el número de personajes relevantes en la mayoría de las escenas, y al dotar a los más relevantes de caracteres fácilmente identificables y distintivos: el ejecutivo de la compañía (Burke), el inquietante androide (Bishop), el marine nervioso (Hudson), el soldado profesional (Hicks), el mando novato y, por supuesto, Ripley y la pequeña Newt.

Cameron supo defender el personaje de Ellen Ripley incluso en contra de las intenciones de la productora, que no quería transigir con las demandas salariales de Sigourney Weaver, dotándola de un papel que desarrollaba enormemente su personaje al tiempo que lo mantenía coherente con lo visto anteriormente. Un punto nada menor es la decisión de incluir una relación maternal con la pequeña superviviente de la colonia, Newt (Carrie Henn), lo que dota de gran simbolismo a las escenas finales al tiempo que aporta un motor creíble a las mismas.

Con una buena idea de base y personajes fuertes y atractivos, Cameron desarrolló un guión que además resulta coherente y trepidante, en el que los pocos lapsus lógicos son soslayados gracias al ritmo y a la atmósfera inmersiva. Tampoco se puede olvidar que Cameron es también un gran especialista en el proceso de montaje, algo que se percibe en todas sus películas, siempre dotadas de fluidez. El montaje de Aliens, realizado principalmente por Ray Lovejoy) no es ninguna excepción: incluso la versión extendida del director, de más de dos horas y media de duración, mantiene enganchado al espectador en todo momento, llevado de situación en situación con una extraña sensación de vivir la película en tiempo real.

A estos ingredientes hay que añadir, nuevamente, un impresionante trabajo de dirección artística, con diseños de vehículos y espacios que son memorables (a cargo de Ron Cobb y Syd Mead) y que aportan una atmósfera característica, opresiva pero funcional, que refuerza la sensación de enfrentamiento entre tecnología y algo orgánico y maligno.

Por todo, una obra maestra.

La edición extendida:

Cameron tuvo que hacer concesionees y recortar la obra tal y como había sido originalmente concebida, lo que le llevó a prolongar el proceso de montaje hasta muy poco antes del extreno. Y aunque el resultado fue sin duda satisfactorio, ya que la película fue un rotundo éxito de crítica y público, Cameron mantendría viva la idea de hacer una versión extendida que reflejara su visión original.

Finalmente, en 1992 Cameron restauró estas escenas recortadas, añadiendo 17 minutos al metraje. En su mayoría son escenas que aportan textura y profundidad a los personajes y a las relaciones entre ellos, por lo que, aunque aportan poco al concepto que vertebra la historia, sí que enriquecen la película.

Premios:

Obtenidos:

• 1987: Oscar (2) a mejores efectos visuales y efectos de sonido
• 1987: BAFTA a mejores efectos visuales
• 1987: Premios Saturn (8) a mejor película de ciencia ficción, director, guión, actriz (Sigourney Weaver), actriz de reparto (Jenette Goldstein), joven actriz (Carrie Henn). actor de reparto (Bill Paxton) y efectos especiales
• 1987: Premio Hugo a mejor representación dramática
• 1987: Premios ASCAP a James Horner
• 1987: Premio de la revista Kinema Junpo (Japón) a mejor película extranjera
• 1987: Golden Reel a mejor edición de sonido

• 2003: Premio DVDX por la Tetralogía de Alien en DVD Alien Quadrilogy
• 2004: Premios Sierra por la Tetralogía de Alien en DVD Alien Quadrilogy

• 2010: Premios Sierra por la Tetralogía de Alien en DVD Alien Anthology
• 2011: Premios Saturn a mejor colección en DVD por la Tetralogía de Alien Alien Anthology

• 2017: Incluida en el Salón de la Fama de la Online Film & Television Association

Finalista:

• 1987: Oscar (5) a mejor actriz protagonista (Sigourney Weaver), dirección artística y decorados, sonido, edición y banda sonora original
• 1987: Globo de Oro a mejor actriz (Sigourney Weaver)
• 1987: BAFTA a mejor sonido, diseño de producción y maquillaje
• 1987: Premios Saturn (3) a mejor actor (Michael Biehn), vestuario y maquillaje
• 1987: Premio de la Academia Japonesa a mejor película extranjera

• 2004: Premios Saturn por la Tetralogía de Alien en DVD
• 2004: Golden Satellite por la Tetralogía de Alien en DVD