Devoradores
Devoradores | |
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Autor: | David Calleja Cuñado |
Otros títulos: | {{{Otros títulos}}} |
Datos de primera publicación(1): | |
Título original: | Devoradores |
Revista o libro: | Libro independiente |
Editorial: | Espiral |
Fecha | Abril de 2009 de {{{Año}}} |
Publicación en español: | |
Publicaciones(2): | Libro independiente |
Otros datos: | |
Saga: | No pertence a ninguna saga |
Premios obtenidos: | No se le conocen |
Otros datos: | No hay otros datos |
Fuentes externas: | |
Tercera Fundación | [{{{URL-3F}}} Ficha] |
ISFDB | [{{{URL-ISFDB}}} Ficha] |
Otras fuentes | {{{URL-OtrasFuentes}}} |
Notas: | |
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David Calleja Cuñado ({{{Año}}})
David Calleja Cuñado (2009)
La trama:
La novela tiene lugar en Plutón. Este cuerpo ha sido colonizado por un grupo de fanáticos religiosos que creen en un dios que, en realidad, es un ser extraterrestre que accede a nuestro universo a través de un portal situado bajo la colonia.
La trama comienza con la llegada a Plutón de un espía del Vaticano (una poderosa fuerza política merced a su control religioso) con la intención de localizar el portal y destruirlo.
Sin embargo, tras su misma llegada los acontecimientos se precipitan de forma inesperada.
La novela:
La novela, aun cuando se intuye que pretende ser una crítica demoledora a la religión, no está a la altura de sus objetivos. El ritmo es irregular y la acción caótica: los personajes van y vuelven de forma desordenada y se dan continuamente situaciones poco creíbles o improbables.
Los mismos personajes son irregulares. Sus motivaciones, aunque originalmente puedan parecer claras, a lo largo de la novela (que tiene lugar en un par de días) cambian con facilidad, incluso a nivel afectivo, restándoles coherencia o credibilidad.
Por último, el estilo es inadecuado: los personajes y el narrador se expresan en frases largas y complicadas que resultan poco naturales, especialmente en los diálogos. Éstos tienen lugar en situaciones de tensión y peligro. La sintaxis, el vocabulario y los recursos estilísticos resultan poco convincentes en personajes que, inicialmente eran cínicos, simples o brutales.