EPIC 2015
| EPIC 2015 | |
|---|---|
| Ficha técnica | |
| Título original: | EPIC 2015 a.k.a.: EPIC 2015, the update' |
| Nacionalidad: | EE.UU. |
| Estreno 1: | [[]] de 2005 |
| Duración: | 9 minutos |
| Ficha artística | |
| Dirección: | Robin Sloan y Matt Thompson |
| Guión: | Robin Sloan y Matt Thompson |
| Producción: | Museum of Media History |
| Fotografía: | No procede |
| Música: | Aaron McLeran |
| Reparto: | No procede |
| Información suplementaria | |
| Otros datos: | EPIC 2015 en YouTube Secuela de EPIC 2014 |
| Imdb: | [ Ficha] en Imdb |
| Notas: | |
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Robin Sloan y Matt Thompson (2005)
- a.k.a.: EPIC 2015, the update
No se trata de un cortometraje tradicional, pues está concebido en formato flash para su visionado a través de la red. No hay actores ni apenas animaciones, sino una serie de textos y fotografías acompañadas de música, con una voz en off que conduce al espectador por este falso dossier. Creado inicialmente como una idea para conferencias y simposios de medios de comunicación, los autores pretendían alertar a sus compañeros periodistas de la posible evolución del medio y el reto (y peligro) que podía suponer no estar preparados.
Se trata de una proyección hacia el futuro cercano del desarrollo de las actuales tecnologías que ofrecen noticias por internet. Paso a paso nos va describiendo una batalla entre Google y Microsoft por hacerse con este jugoso mercado y cómo durante la lucha entre los dos gigantes los medios de prensa tradicionales quedan defenestrados al no poder competir. Así, el New York Times intenta primero ofrecer sus servicios online, luego protesta contra el monopolio ejercido por Googlezon (la triunfal unión de Google y Amazon) retirándolos, para terminar siendo relegado a una gacetilla en papel destinada a una elite intelectual de tendencias retro.
Pero esto no es ni mucho menos lo más interesante de este documental ficticio, sino la evolución del propio concepto de noticia online.
Gracias al poderoso motor de búsqueda de Google y el resto de servicios según preferencias del cliente, unido a la enorme base de datos de preferencias de Amazon, las noticias son diseñadas para consumo personalizado. Google trocea las noticias, separa opiniones de hechos y gracias a la base de datos de Amazon, luego junta los pedazos y los sirve como producto terminado a su cliente.
El resultado, obviamente, depende del cliente. Como bien afirma el documental en sus frases finales, esto puede dar lugar a una visión de la realidad más rápida y profunda –en su mejor versión de uso- o a un conjunto de trivialidades muchas de ellas falsas –en su peor uso-.
Y más aún. El producto servido al cliente pasa indefectiblemente por los algoritmos proporcionados por una única compañía, aunque la información, en origen, provenga de muy diversas fuentes, muchas de ellas fiables y objetivas. Una única compañía sirviendo noticias es un monopolio peligroso.
Habrá que confiar, entonces, en la declaración de política de empresa de Google, una de cuyas premisas afirma que no harán el mal.
