Diferencia entre revisiones de «Guía para una muerte virtual»
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Revisión de 22:14 28 mar 2020
| Guía para una muerte virtual | |
|---|---|
| Autor: | J.G. Ballard |
| Otros títulos: | ' |
| Datos de primera publicación(1): | |
| Título original: | A Guide to Virtual Death |
| Revista o libro: | Interzone, #56 |
| Editorial: | |
| Fecha | Febrero de 1992 |
| Publicación en español: | |
| Publicaciones(2): | Cuentos completos |
| Otros datos: | |
| Saga: | |
| Premios obtenidos: | |
| Otros datos: | Ficha en ISFDB |
| Fuentes externas: | |
| Tercera Fundación | [{{{URL-3F}}} Ficha] |
| ISFDB | [{{{URL-ISFDB}}} Ficha] |
| Otras fuentes | {{{URL-OtrasFuentes}}} |
| Notas: | |
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J.G. Ballard (1992)
Guía para una muerte virtual es un relato de J.G. Ballard publicado por primera vez en la revista Interzone y luego en varias antologías sajonas. En castellano permanecería inédito hasta la publicación de Cuentos completos en 2013.
Sinopsis:
Tras un breve párrafo introductorio en el que se pone en antecedentes al lector, informándole de que la vida inteligente en la Tierra se extinguió a finales de 1999, se proporciona un horario televisivo de una cadena, con la programación emitida el 23 de diciembre de 1999, a modo de documento que permita comprender un poco mejor el contexto de la catástrofe.
La guía de programación que se reproduce describe, indirectamente, una sociedad que parece psicológicamente enferma, cuyo entretenimiento gira en torno la sexo y la violencia, en el que las noticias se han convertido en meros reclamos morbosos y en el que sus ciudadanos parecen apartados.
El relato:
Sin duda, las breves descripciones de los programas permiten reconstruir una sociedad en la que el ciudadano medio prácticamente no sale a la calle, pasa de casa a la oficina o al centro comercial a través de grandes no-espacios destinados a la gestión de vehículos y pasajeros (aeropuertos, estaciones, aparcamientos subterráneos...). En su hogar, el ocio parece emanar del televisor y los programas que ofrecen son igualmente alienantes.
En un principio, el relato parece ausente de hilo narrativo. Da la sensación de que no fuera más que un listado, frases que retratan una sociedad enferma por su inadecuada tecnificación -el tema estrella de Ballard-, pero que no progresara más allá de la descripción de este escenario.
Posiblemente, esta técnica deconstructiva e indirecta la utilizase Ballard con más éxito en El índice (1977), un relato que juega con el lector y le obliga a unir los retazos de información hasta completar la narración. En esta Guía..., por contra, el requerimiento al lector es mucho más modesto. Sin embargo, si hay una muy sutil narración, propuesta por el párrafo introductorio, en el que se sugiere que la naturaleza psicopática de la programación televisiva podría estar muy relacionada con las causas de la extinción de la especie. Le corresponde al lector imaginar la mayoría de la historia, una premisa que deja abierta la puerta a múltiples posibilidades.
En cualquier caso, la crítica a nuestra sociedad actual, por más que sea evidente, no deja de ser aguda, satírica, ballardiana.
