Diferencia entre revisiones de «Saga de los juegos del hambre»

Revisión de 14:19 14 sep 2015

Nota: Este artículo se refiere a la saga de ciencia ficción. Para otros usos ver Los juegos del hambre.

La Saga de los juegos del hambre es una saga de ciencia ficción formada por la trilogía de novelas escrita por Suzanne Collins y sus adaptaciones cinematográficas.

Las premisas:

Se trata de un escenario distópico clásico. Tras una guerra civil que asoló los EE.UU., una docena de distritos rebeldes han sido sometidos al mandato del Capitolio. La vida en estos distritos es básicamente rural y la población se ha reducido a pequeñas poblaciones apenas urbanizadas y que sufren graves penurias mientras en el Capitolio los gobernantes viven rodeados de riqueza y lujos obscenos.

La singularidad de esta distopía son los juegos del hambre que le dan nombre. Cada año, los doce distritos sometidos entregan una pareja de muchacho para que luchen a muerte en un escenario construído a tal propósito. Esta lucha entre los veinticuatro adolescentes será transmitida por televisión a todos los distritos y, al final, sólo puede quedar uno.

La protagonista es Katniss Everdeen, que se ofrece voluntaria a luchar en lugar de su hermana menor cuando ésta es elegida en el sorteo.

La saga:

La trilogía de novelas está claramente dirigida a un público juvenil (aunque no infantil, dada la violencia de algunas de las situaciones) y, como tal, cumple todos los requisitos para triunfar: la protagonista tiene cualidades especiales aunque no un estilo de vida afortunado, y serán estas cualidades las que le harán triunfar allí donde menos se espera.

No es distinto de las premisas de El juego de Ender, Harry Potter u otras sagas similares. El lector adolescente, enfrentado a su propio cambio e incapaz de sentirse entendido en el mundo adulto al que se enfrenta, se siente identificado con esl personaje protagonista singular que triunfa ante los demás.

A pesar de la simplicidad del planteamiento, de ser una colección de lugares comunes sin originalidad (desde los personajes estereotipados hasta los escenarios), hay que reconocer que la primera novela es un producto bien realizado. A un lector adulto le resultará predecible, poco novedosa y carente de originalidad, pero está bien escrita, es amena y el ritmo y las situaciones están bien llevados.

Por desgracia, la calidad y credibilidad de las novelas es descendente: la segunta resulta mediocre y la tercera claramente prescindible.