La llegada (Película)

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Nota: Este artículo se refiera a la película de Denis Villeneuve de 2016. Para otros usos ver La llegada.

La llegada (Película)
Ficha técnica
Título original: The Arrival
Nacionalidad: EE.UU.
Estreno 1: 1 de septiembre de 2016
Duración: 116 min.
Ficha artística
Dirección: Denis Villeneuve
Guión: Eric Heisserer (Basada en La historia de tu vida, de Ted Chiang)
Producción: Dan Levine, Shawn Levy, David Linde
Fotografía: Bradford Young
Música: Jóhann Jóhannsson
Reparto: Amy Adams, Jeremy Renner, Michael Stuhlbarg, Forest Whitaker, Sangita Patel, Tzi Ma, Abigail Pniowsky, Mark O'Brien
Información suplementaria
Otros datos: No hay otros datos
Imdb: Ficha en Imdb
Notas:
  1. Fecha de primer estreno. No tiene por qué coincidir con el estreno en salas comerciales o emisión en abierto; puede ser en premieres, festivales u otras formas de distribución reducida o exclusiva.

Denis Villeneuve (2016)

La llegada es la adaptación cinematográfica del relato La historia de tu vida (Ted Chiang, 1998).

La película comienza con unas escenas de la protagonista con su hija, desde su infancia hasta su muerte por enfermedad para, acto seguido, comenzar con lo que parece ser el eje de la historia: la llegada de naves extraterrestres a la Tierra.

Doce naves han aparecido sobre distintos puntos del planeta. Nadie sabe de dónde vienen ni qué quieren, pero pronto se establece un perímetro en torno a cada nave y cada país envía a sus especialistas para tratar de establecer una comunicación.

La protagonista, Louise Banks, es una reputada lingüista que ha trabajado en el pasado para los servicios de defensa de los EE.UU., por lo que es designada como uno de los interlocutores de la nave aparecida en territorio estadounidense. Junto a ella es seleccionado Ian Donnelly, un físico, bajo la premisa de que las matemáticas y las leyes de la física deberían ser una de las llaves en la comunicación. Este intento de establecer una comunicación es el eje real de la historia.

Sobre esta trama principal se establecen otras secundarias. Entre ellas destaca la tormenta política y la tensión creciente entre las naciones. La idea de que la Tierra no es un ente político unido y que la mayor noticia de la historia puede acabar desencadenando un enfrentamiento militar había sido descuidada en el relato original, demasiado centrado en los trabajos de Banks y ajeno a las circunstancias que la rodean más allá del perímetro de seguridad.

Otra de las diferencias significativas de la película respecto al relato es el papel de Donnely. En la historia contada por Chiang las matemáticas y la forma de aproximarse a la comprensión de las leyes físicas es fundamental para comprender la psicología de los extraterrestres. Sin embargo, en la adaptación cinematográfica Donnely es apenas un segundo de Banks sin ninguna aportación relevante más allá de alguna frase esporádica. Esto resulta un error de la película, pues resta profundidad al segundo personaje más importante al tiempo que esconde a los espectadores una de las claves para comprender la gran diferencia entre la forma de entender el universo de los humanos y la de los extraterrestres. Haber mostrado estas diferencias habría hecho más sencillo conducir al hecho de que humanos y extraterrestres perciben el tiempo de forma distinta y habría permitido una transición más fluida al final de la historia.

Pese a ello la película es una excelente adaptación de un relato sumamente especulativo y muy difícil de llevar a la pantalla. Consigue no perderse en acontecimientos secundarios e incidir en la que quizá sea la premisa principal del relato de Chiang: la idea de que el lenguaje moldea la mente y, con ella, la percepción del mundo y cómo estas percepciones subjetivas diferentes pueden suponer dificultades de comunicación entre quienes hablan idiomas distintos.

Más allá de lo que supone ser una adaptación, la película es excelente como producto cinematográfico con entidad propia. La dirección sabe marcar un ritmo pausado pero no aburrido que conduce al espectador hacia los temas que el director quiere contar sin perderse en fuegos de artificio. Así mismo, la realización es más que notable, con efectos visuales muy bien logrados que, de nuevo, sirven de apoyo a la trama sin distraer al espectador. Especial mención merecen tanto las interpretaciones (sobrias, en general contenidas, pero en todo momento creíbles) y la fotografía, que se recrea en espacios y paisajes amplios que dibuja con colores sobrios y apagados.

En definitiva, una adaptación excelente y una película muy recomendable.

Premios:

Obtenidos: