París, sector soviético

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París, sector soviético
Datos de publicación:
Título original: Jour J. Paris, secteur soviétique
Fecha de publicación: 2010
Guión: Fred Duval, Jean Pécau
Dibujo/Tinta: Gaël Séjourmé
Color: Se desconoce
Editorial: Delcourt
Otros datos:
Premios obtenidos: No se le conocen
Otros datos: No hay otros datos

(Fred Duval, Jean Pécau -guión-, 2010)

Se trata del tercer volumen (según la edición española) de El día D, una serie de cómics franceses que plantean distintas ucronías. En concreto, este volumen plantea la posibilidad de que el avance de la URSS durante la caída de alemania nazi de Hitler lograra llegar hasta París, que queda divida como el Berlín de nuestra línea temporal.

Las premisas:

El punto Jombar de este relato son dos sucesos: Por una parte, condiciones metereológicas adversas detienen el desembarco de Normandía. Por otra, un ejército soviético exhausto en 1945 da un respiro a las tropas alemanas del frente ruso, que se desplazan al frente occidental para detener el avance aliado. Cuando los rusos se reorganizan y atacan, nada frena su avance hasta Berlín y más allá, llegando hasta París, cuya orilla derecha dominan.

El cómic:

El cómic comienza en 1951, en plena guerra fría. La primera escena tiene lugar en el checkpoint Charlie, situado en uno de los extremos del puente que une Trocadero con los Campos de Marte y la torre Eiffel. El ambiente es tenso pues se espera la llegada de una agente infiltrada con información fundamental. Se trata de una recreación de la primera escena de El espía que surgió del frío (John LeCarré, 1965) tan indisimulada que incluso aparece John Smiley.

Tras esta escena inicial y tras una breve transición para contextualizar la trama, la historia sigue al policía y Saint-Elme hasta el sector soviético, donde un asesino en serie está asesinando prostitutas. Según los acuerdos, toda investigación criminal debe ser llevada a cabo por policías de ambos bandos, oportunidad que aprovecha el bloque oeste para infiltrar a Sain-Elme.

Esta segunda parte mezcla una trama de asesinatos que imita a la historia de Jack el Destripador con una historia de espías y persecuciones no demasiado bien tejida. Aunque la historia tiene buen ritmo y las escenas de acción se suceden de forma más o menos fluída, no hay en ningún momento una trama de investigación. El asesino es conocido, no hay doble juego de espionaje...

Desde el punto de vista del argumento, pues, la historia es entretenida, pero no remarcable.

Algo similar sucede con el dibujo: el diseño y distribución de las viñetas, la ejecución del dibujo y la tinta, el color... todo está impecablemente ejecutado y, sin embargo, parece faltar algo que lo haga especialmente remarcable.

Se trata, pues, y en definitiva, de un cómic entretenido y bien echo, pero no especialmente notable.